El martes, 29 de julio de 2025 a las 09:16
Rabanera del Pinar volvió a convertirse en un punto de encuentro para amantes del senderismo, la marcha nórdica y las carreras nocturnas con la celebración, el pasado sábado 26 de julio, de la IX Travesía Nocturna Ruta del Boletus. Un total de 470 participantes recorrieron los espléndidos paisajes de la comarca burgalesa en una noche marcada por el buen ambiente, la excelente organización y el compromiso solidario.
La cita ofreció dos recorridos, de 7 y 11 kilómetros, que transcurrieron entre robledales, la Vía Verde del Santander-Mediterráneo y los pinares que rodean el municipio, culminando con un descenso desde el emblemático campanario hasta la zona deportiva del pueblo.
Esta edición tuvo además un carácter solidario, gracias a la colaboración con HEMOBUR, asociación que trabaja en favor de las personas con hemofilia. El “Boletus Especial” entregado a la entidad fue uno de los momentos más emotivos de la jornada.
Resultados deportivos
En categoría masculina, el más rápido fue Javier Fernández Izquierdo (Atletismo Briviesca-Norpetrol) con un tiempo de 42:52, seguido de Fernando Marcos Santamaría (C.D. Tragalpinos) y Jorge Izquierdo Benito (Aranda Granja de Chico Ibercaja).
En categoría femenina, la victoria fue para África Del Cura Hurtado (Rayistas de Rabanera), por delante de Sandra Jessica Ortiz Ibáñez (Miércoles a Correr) y María Peral González de la Peña (Independiente).
Comunidad y hospitalidad
La implicación del Ayuntamiento de Rabanera del Pinar y el trabajo ejemplar de su equipo de voluntarios fueron clave para el éxito del evento. Desde la señalización del recorrido hasta la atención a los participantes y la cobertura fotográfica, todo estuvo cuidado al detalle. El ambiente familiar y la hospitalidad local reforzaron el carácter especial de la jornada.
Como colofón, los asistentes disfrutaron de sopas de ajo, fruta, bebidas y productos locales al llegar a la meta. También se entregaron premios y se sortearon regalos entre los participantes.
La Ruta del Boletus vuelve a demostrar que el deporte en el medio rural puede ser una experiencia inolvidable cuando se conjugan pasión, naturaleza y comunidad.